lunes, 1 de junio de 2015

DUDAS EN TORNO A UN JUEZ ROMANO


Reconquista (extracto)


1. Nos preguntamos lo que Mons. Fellay considera como muy grave. ¿Se trata únicamente de faltas contra la moral, o bien la “rebelión contra la autoridad", la corrección de faltas de ortografías a una carta anónima, o el envío de correos privados desaprobando la política de la casa General entran en esta categoría de cosas serias? La consagración episcopal sin mandato romano, ¿es una cosa muy grave para Mons. Fellay?

2. La utilización del nuevo Código en los procesos canónicos o “administrativos” de la FSSPX, ¿está relacionado con esta “promoción” de Mons. Fellay como juez romano? En efecto, para que el proceso sea reconocido por Roma, parece normal que el código utilizado sea el que está en vigor en Roma…

3. Si la jurisdicción de Mons. Fellay es reconocida para cosas graves, ¿por qué no lo sería para las cosas menos graves?

4. Hasta ahora, la jurisdicción de la FSSPX no ha sido reconocida, al menos en teoría; así los matrimonios han sido declarados nulos si fueron contraídos ante un sacerdote de la Tradición. Así es probablemente para los juicios penales, aunque no tengamos un ejemplo. Ahora, al menos en materia penal para los asuntos graves, la jurisdicción de la FSSPX es reconocida por la iglesia oficial, y Mons. Fellay tiene su poder judicial –al menos en este caso- de Roma… ¿No habría allí, en un dominio restringido, un “acuerdo práctico”, un “reconocimiento unilateral”?

5.    ¿No se tratará de un « reconocimiento a lo chino » (para reabsorber el cisma de la “Iglesia popular”, el papa nombró los obispos populares a las sedes que detentaban y validó sus actos a fin de que hubiera la menor oposición posible entre las dos iglesias)? Roma está reconociendo a la FSSPX en ciertos dominios (estos juicios), hace acercamientos en ciertos lugares (Buenos Aires)…

6.   Sabemos que, de acuerdo al P. Anglés (canonista de la FSSPX), el nuevo código fue utilizado para los procesos de nulidad de matrimonio con el fin de “crear puentes” con Roma; parece que ahora sucede lo mismo en los procesos penales. 

Tenemos allí un ejemplo de la técnica de los “pequeños pasos” preconizada por los fundadores de Europa. Esta técnica está descrita en todos nuestros cheques europeos: "Europa no se hará de un solo golpe ni en una construcción de conjunto; se hará por las realizaciones concretas creando una solidaridad de hecho". Reemplace Europa por el acuerdo, y tendrá usted la receta que nos preparan ciertos eclesiásticos romanos, del Valais o teutones…